Hemorragia Puerperal, Causas Y Cuidados

Después del parto, es normal presentar sangrado, esto se conoce como loquios, que son una mezcla de tejido uterino, mucosidad y sangre, esto es parte del proceso natural que tiene el cuerpo para eliminar de los loquios provenientes del útero, esto forma parte del proceso de recuperación y, por lo tanto, es bastante normal.

Pero en algunas madres se puede llegar a presentar una condición médica que se conoce como hemorragia puerperal o hemorragia postparto precoz (HPP) y ocurre casi siempre durante las primeras 24 horas tras el parto, aunque también se puede presentar en el lapso de las primeras 12 semanas luego del parto, aunque en muy raras ocasiones.

Generalmente, este tipo de hemorragia es grave.y suele ser ocasionada por:

• Atonía uterina. Es la causa más común de hemorragia posparto y se trata de una afección en la que el útero, por alguna razón, no se contrae después del parto, dejando a la mujer en riesgo de sufrir una hemorragia puerperal.

• Laceración. Es posible que presentes sangrado después del parto debido a laceraciones uterinas, cervicouterinas o vaginales.

• Desgarro vaginal. Puede ser otra de las causas de la hemorragia puerperal, hay varios factores de riesgo entre los que se encuentran un parto vaginal después de una cesárea, cicatrices uterinas y algún traumatismo.

• Placenta retenida. Sucede cuando la placenta no es expulsada del útero, sucede cuando la placenta se desprende parcialmente del revestimiento del útero, lo que causa una contracción uterina inadecuada, provocando los vasos sanguíneos dentro del útero sigan sangrando mientras la placenta esté retenida en el útero.

• Placenta adherida. Esta es una alteración en la que la placenta se adhiere con demasiada profundidad en la pared uterina, además existen otros dos tipos, placenta increta y placenta percreta, pero las tres se diferencian por la profundidad de su adherencia a la pared uterina y esta hemorragia se produce especialmente cuando el obstetra intenta extraer la placenta.

• Inversión uterina. Esta es una complicación que ocurre como su nombre lo dice, se vuelve del revés, cuando este tipo de complicación sucede además del sangrado suele presentarse presión arterial baja y el dolor abdominal, esta condición regularmente se da por la musculatura uterina débil o un cordón umbilical corto.

Según los expertos médicos, la pérdida de sangre excesiva se diagnostica cuando una mujer pierde más de 500 ml de sangre tras el parto vaginal y más de 1000 ml tras el parto por cesárea, si esto sucede puede causar muchas complicaciones que pueden poner en riesgo la salud de la madre.

¿Cómo saber si tengo una hemorragia puerperal?

Puede presentar coágulos de sangre anormalmente grandes (más grandes que una ciruela), flujo de sangre continuo que no se detiene.

Otros síntomas son:

• Presión arterial baja (hipotensión)

• Mareo

• Debilidad

• Náuseas

• Frecuencia cardíaca elevada

• Desmayo

• Visión borrosa

• Escalofríos

• Inquietud

• Taquicardia

• Dolor e hinchazón en la vagina, zonas cercanas, abdomen.

Si notas que estás sangrando de manera excesiva y continua, pide a tus familiares que te lleven a la clínica de urgencia.

Recomendaciones

Durante tu período de recuperación si sufriste una hemorragia puerperal, evita cualquier tipo de actividad o ejercicio y guarda mucho reposo.

Come alimentos ricos en hierro como:

• Carnes rojas y mariscos

• Vegetales de hojas verde oscuro como la espinaca

• Pipas de calabaza, frutos secos y garbanzos

• Lentejas

• Judías y guisantes.

La razón por la que es importante consumir una dieta rica en hierro después de haber sufrido una hemorragia puerperal es porque tu cuerpo desarrolla deficiencia de hierro (anemia), también añade alimentos ricos en vitamina C a tu dieta, ya que ayuda a tu cuerpo a absorber el hierro, evita los productos lácteos porque el calcio puede dificultar que tu cuerpo absorba el hierro, además, añade alimentos altos en fibra a tu dieta como los cereales integrales y frutas para evitar el estreñimiento.

Por último, cuida tu salud mental, porque muchas mujeres que han padecido hemorragia puerperal presentan depresión posparto, por lo que si crees tener esta condición ve al médico, habla con alguien o únete a un grupo de apoyo de mujeres que han pasado por una experiencia similar.